Diseñar y fabricar ropa de manera casera es también una manera de tener prendas 100% originales, ahorrar dinero, combatir ciertos cánones o estereotipos que impone la moda y, en algunos casos, incluso emprender en esta industria.

Aprender conceptos básicos sobre telas, patrones y tipos de fisionomía

El fenómeno actual de interés por la moda y la costura no es, sin embargo, nada novedoso. La costura siempre ha formado parte de muchas casas, y una muestra de ello es que muchas amas de casa durante la década de los 60 y 70 tenían en sus hogares una máquina de coser.

En estos momentos existe un resurgir de esta actividad. Buena parte de culpa de este fenómeno radica en que, a pesar de que con la “fast fashion” se puede conseguir ropa a precio muy económico, los tejidos no siempre son de calidad y los diseños no son nada originales. Al final, todas las personas parecen fotocopias unas de otras.

Así, para iniciarse en el mundo del diseño, es importante pedir asesoramiento profesional y conocer conceptos básicos de esta industria. Esto se puede hacer a través de actividades formativas que se ponen en marcha en prácticamente todas las ciudades y, por supuesto, también a través de la red.

En internet se puede encontrar prácticamente todo hoy en día, y con los patrones de ropa no iba a ser diferente. La cuestión de los patrones es muy relevante porque, incluso teniendo bastante experiencia en moda y confección, aprender a sacar patrones de prendas ya hechas no es tarea fácil.

Una segunda recomendación es profundizar en el conocimiento de las telas y los tejidos, para saber qué tipo de textil es el más apropiado para cada prenda. En este sentido, portales online de venta de telas como Tejidos de Moda resultan de gran ayuda, pues en ellos podemos encontrar productos con una muy buena relación calidad – precio y amplia información sobre los mismos.

En el asesoramiento, una información que resulta de gran utilidad es conocer bien el tipo de cuerpo para el que se diseña la ropa. Podemos hablar de cuerpos en forma de triángulo invertido, en forma de regla, de óvalo, de pera o reloj de arena, entre otros. Cada una de estas etiquetas hace referencia a la fisionomía: hombros anchos; hombros, cintura y caderas alineadas; caderas anchas con hombros estrechos; más o menos pecho, etc.

Invertir en materiales de calidad

Para dedicarse a la costura, ya sea como afición o desde un punto de vista del emprendimiento, existen inversiones que son imprescindibles. Con las tijeras, por ejemplo, no se puede escatimar y deben ser de calidad.

Las telas es otro ejemplo de ello, aunque quizás menos significativo, porque se pueden diseñar prendas a partir de telas recias y duraderas y otras, en cambio, que no necesiten tales características.

En cualquier caso, si el objetivo es que los diseños luzcan bien y alcancen un nivel mínimo de calidad es aconsejable hacer compras que respondan a este objetivo. El portal Tejidos de Moda, con sus telas estampadas, es un buen ejemplo de ello. Las telas a la venta en esta web son una buena elección para prendas como camisas, vestidos e incluso pantalones, y destacan por su amplia variedad de colores y tejidos.

Una última inversión importante, dejando a un lado otros utensilios que no son las tijeras ni máquinas de coser, son los hilos. Los hilos, si no son de buena calidad, pueden atascarse, partirse o enredarse. Si ya el proceso de diseño y fabricación de prendas propias lleva aparejado muchas horas de trabajo, dedicar tiempo improductivo a enhebrar, desliar y descoser hilos como precio a pagar por su mala calidad, puede acabar hasta con la paciencia del Santo Job.

Comenzar con diseños sencillos

Una vez se consiguen todas las herramientas necesarias para iniciarse en el diseño y se ha adquirido formación suficiente para ello, los comienzos deben ser lo más cómodos posibles, lo que se traduce en diseños sencillos.

Aquí juegan un papel importante los patrones y las medidas. No importa si el patrón se ha hecho o se ha comprado, lo más cómodo es comprarlo para no caer en el error de hacer un mal patrón, y hay que dedicar el tiempo suficiente para tomar las medidas correctas. Si se cometen fallos en este punto, todo el trabajo que siga a este proceso será en balde.

Una vez se adquiera experiencia, ya habrá tiempo para animarse con proyectos más complejos, y quién sabe, si descubres tu pasión, ¿por qué no emprender con la moda?