La subdirectora general de Protección del Patrimonio Histórico del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, Elisa de Cabo de la Vega ha sido la encargada de inaugurar el 43 Congreso nacional de Parques y Jardines con la ponencia titulada ‘El patrimonio cultural y natural en la Convención de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Situación actual y perspectivas’.
Elisa de Cabo es licenciada en derecho, funcionaria de la Administración Pública, y subdirectora desde 2006 del área de Protección de Patrimonio Histórico y ponente en varios foros a nivel mundial.
Durante su intervención ha subrayado que la Convención de Patrimonio Mundial de la UNESCO incluye en esta lista por igual medida los bienes culturales y naturales. Fue en 1972, gracias a la presión de EE.UU, “cuyos parques nacionales están concebidas como catedrales”, cuando se logró en la cita de París incluir el concepto de la preservación de los bienes culturales y naturales.
Actualmente en la lista de la Convención hay 1.031 bienes declarado de 163 países. Un total de 802 son bienes culturales frente a 197 naturales. Aragón tiene uno de cada: el Mudéjar y el parque nacional de Ordesa y Monte Perdido.
España es el tercer país en la lista de bienes declarados Patrimonio Mundial, con 44 bienes. un dato que según afirmó la subdirectora de Protección desconoce mucha gente. Quince cascos históricos como Santiago, arqueología y prehistoria como Altamira, bienes naturales como Doñana, bienes mixtos, como Ibiza, y paisajes culturales, como Aranjuez con sus jardines, e itinerarios culturales (el Camino de Santiago). “Contamos con un extraordinario patrimonio y si somos una potencia en algo es en eso, en cultura y naturaleza. Estamos bastante bien organizados y trabajamos con las Comunidades Autónomas y somos bastante exigentes para elaborar las listas indicativas”, ha explicado.
El Patrimonio Mundial se concentra en Europa, continente que reúne el mayor número de bienes declarados, frente a África, el menor. Los conjuntos históricos son los mayoritarios. “La sociedad sigue teniendo una visión monumentalista y europeista del patrimonio”, en detrimento de lo natural, ha apuntado de Cabo. Para equilibrar esta circunstancia, la Convención ha lanzado una estrategia global para animar la inclusión de nuevos países y ampliar el espectro como patrimonio industrial (el puente colgante de Portugalete, es un ejemplo) y el paisaje cultural.
El patrimonio natural va ganando peso y en la lista cabe destacar la presencia de varios espectaculares jardines en Austrialia, Austria, China, República Checa, Alemania, Italia, Japón, Singapur, Turquía, Francia o los de Aranjuez en España. “No hay ninguna duda de que el jardín sea considerado un patrimonio mundial. Como decía María Zambrano: ‘los jardines son arquitectura con alma”, ha declarado..
Las últimas incorporaciones por la UNESCO son 23 nuevos bienes entre los que se incluyeron cinco jardines, dos ampliaciones de bienes naturales y un bien mixto. España logró incluir el recorrido del Norte del Camino de Santiago pero no pudo meter el patrimonio vitivinícola de La Rioja, ya que habían otros bienes similares en la lista.
Por otro lado, la UNESCO está prestando atención al desarrollo sostenible, la conservación y la gestión de estos bienes. “La labor del Estado es sensibilizar sobre la preservación y convencernos de que somos pioneros en cultura y patrimonio”, ha concluido de Cabo.
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