El pasado fin de semana el ayuntamiento de Villanúa junto a Ricardo Bosque organizaron en la localidad oscense unos encuentros muy especiales. Bajo el título de VillaNoir dicha localidad se sumergía de lleno en un homenaje al género negro con escritores que abordaron para un público que en todo momento llenó las salas, diferentes temas dentro de la literatura, publicidad y cine de género negro.
Tras un concierto a cargo del Trío Dilettanti que el viernes se encarga de inaugurar el I encuentro de Género Negro, VillaNoir recorriendo las bandas sonoras de películas que todos conocemos, llegó la hora el sábado de la novela negra. Las escritoras Susana Hernández , Laura Balagué, Carlos Bassas del Rey, director de Pamplona Negra, y Santiago Álvarez, director de Valencia Negra nos hablaron de orígenes y la evolución de la literatura negra en España, desde Vázquez Montalban y González Ledesma hasta la actualidad, pasando por Juan Marsé, Eduardo Mendoza, Lorenzo Silva y Alicia Giménez, estos últimos, “contribuyeron a normalizar a las fuerzas de seguridad, en el caso de Silva, y a introducir a la mujer en este género, Alicia”, señalaron. Los cuatro autores también han coincidido en destacar “lo complicado que resulta sobresalir en un mundo en el que hay “boom” de escritores, pero no siempre de novelas de calidad”
Ya en la jornada de tarde, pero sin abandonar la literatura de género, una mesa debate en el salón de actos del CIN Subterránea se completaba ante la presencia de Lorenzo Silva, Esteban Navarro y Óscar Bribián moderados por Juan Mari Barasorda. Analizaron estos autores la escritura de los policías dejando en el aire una reflexión: los policías suelen ser buenos contadores de historias.
Al final de esta segunda mesa literaria, el escritor afincando en Huesca Esteban Navarro, daba la primicia de la publicación de nueva novela Una historia de policías, que salía a la venta ese sábado bajo el sello editorial Playa de Ákaba.
Y de reflexiones literarias a las risas, que llegaron de la mano de Paco Bescós que deleitó a todos lo que estábamos allí presentes en una divertida presentación de la publicidad basada en las historias de cine negro analizando junto a los espectadores los anuncios más creativos basados en el mundo del crimen.
Concluían las jornadas el domingo con un Cluedo en vivo que se ha basado en la historia de la Estación de Canfranc y en los acontecimientos que en ella tuvieron lugar durante la II Guerra Mundial. Organizado por la Biblioteca de Villanúa y El Club de las Charradas, acto al que acudieron una veintena de niños, de entre 5 y 12 años.
El cine ha puesto el ponía el punto final al I VillaNoir. Las proyecciones de “Perdición” y “El tercer hombre”, dos obras maestras clásicas del cine negro, cerraban un programa que todos valoran positivamente.
De cara a esa próxima edición, Ricardo Bosque plantea mantener el modelo del encuentro: “El esquema y planteamiento de VillaNoir está bien, un encuentro de tres días, en fin de semana, que hay que ir consolidando; por lo que en la segunda edición no habría cambios en ese sentido, pero sí nuevos contenidos y temáticas a abordar”.
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