El reconocimiento se celebró el 20 de marzo, justamente en el día en el que se cumplen 150 años del viaje que hicieron estos dos vecinos oscenses desde Huesca a Zaragoza y regreso en dos velocípedos construidos en el taller de los hermanos de Mariano, José y Nicomedes Catalán. Con aquella gesta situaron a su ciudad en la historia del transporte en velocípedo –hoy llamado bicicleta- realizando una hazaña hasta ahora poco divulgada.
La concejala de Movilidad, Teresa Sas, ha intervenido en el acto, en el que han participado descendientes de ambos pioneros, de los que, además de su proeza, ha destacado que fueron trabajadores municipales, ya que Mariano Catalán perteneció al Cuerpo de Bomberos y Gregorio Barrio fue Oficial Mayor de la Secretaría. También Alejandro González ha tomado la palabra en nombre de la Asociación Cultural Mariano Catalán, que ha impulsado esta iniciativa y ha reunido a los familiares de los dos homenajeados en este reconocimiento del Ayuntamiento, para recordar las reseñas aparecidas en la prensa nacional de la época sobre esta hazaña.
Teresa Sas ha entregado una placa conmemorativa a Carmen Motta, biznieta de Mariano Catalán, que se ha mostrado muy agradecida por el homenaje. Y la concejala Silvia Mellado ha sido la encargada de entregar otra placa a Pablo Barrio, nieto de Gregorio Barrio, que ha declarado sentirse muy orgulloso de su abuelo y también ha dado las gracias «a todos los que han colaborado en este acto».
El homenaje ha finalizado con una fotografía de familia en el patio del Ayuntamiento junto a las réplicas de las bicicletas que se utilizaron en aquel primer viaje, realizadas por Juan José Sanagustín.
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