Las asociaciones de vecinos Osce Biella y María Auxiliadora, la Federación de Barrios, la Asociación Cultural Colectivo Ciudadano, Acción Pública para la Defensa del Patrimonio, Apudepa, a través de su portavoz local, arquitectos, historiadores del arte, restauradores, arqueólogos, pequeños comerciantes de los barrios de San Pedro y la Catedral, así como personas a título particular, han constituido la Plataforma para la Defensa del Patrimonio de Huesca, con el fin de reivindicar la importancia del legado histórico artístico relacionado con la calidad de vida y trabajar contra la degradación y el olvido institucional en esta materia prolongado durante décadas en la ciudad.

El anunciado derribo de la casa del siglo XIX ubicada en la plaza de San Pedro y el proyecto que se cierne sobre el conjunto del antiguo Seminario constituyen las actuaciones inmediatas por las que se va a movilizar la recién constituida Plataforma, pero los ejemplos de deterioro ambiental, paisajístico, urbanístico y monumental, en particular en el Casco Viejo, conforman un lacerante catálogo que justifica la intervención ciudadana en beneficio de la conservación de bienes muebles e inmuebles irremplazables pero en situación de deterioro progresivo. Igualmente, la memoria histórica y democrática, constituye otra de las preocupaciones objeto de interés en el ámbito del colectivo.

Concienciar y sensibilizar a la opinión pública acerca de la importancia y el valor cultural derivado de la conservación patrimonial es uno de los objetivos que promueve la Plataforma, pero también el de buscar la interlocución con las administraciones públicas, en particular con el Ayuntamiento, que carece de técnicos en la gestión del patrimonio cultural e histórico, y cuyas políticas no han propiciado la rehabilitación ni la recuperación de edificios o conjuntos urbanos, así como tampoco la incorporación de notables vestigios arqueológicos a la ruta cultural y turística de la ciudad.

La Plataforma para la Defensa del Patrimonio de Huesca es un foro abierto a la ciudadanía y a las entidades patrimonialistas que quieran colaborar en el necesario empeño de la preservación de las raíces culturales, a través de la memoria monumental y el reconocimiento del legado inmaterial conformado a lo largo de los siglos.