El Colectivo Ciudadano ha elaborado un extenso documento de carácter histórico y arquitectónico relativo al antiguo Seminario Conciliar, además de un informe pericial firmado por la historiadora del arte María José Calvo, en el que se pone de relieve el valor urbano e histórico artístico del inmueble a través de sus distintas etapas constructivas. Ambos documentos vienen a avalar la solicitud de declaración como monumento de interés local para los dos patios que el Ayuntamiento pretende derribar si se materializa el proyecto de reforma necesario para alojar dependencias del campus universitario de Huesca y otros usos no definidos.

El conjunto histórico del Seminario, de gran monumentalidad –refiere la documentación señalada–, está compuesto por diversos volúmenes correspondientes al arco temporal que discurre desde el siglo XII hasta el siglo XX. Tras la construcción de la iglesia románica, declarada Bien de Interés Cultural, en el siglo XVI se levantó un primer edificio adosado a la iglesia conformando un patio, siendo a finales del siglo XIX cuando se construye un segundo edificio en torno a otro patio contiguo al primero. Las tres arcadas de este patio decimonónico han sido declaradas recientemente Bien Catalogado del Patrimonio Aragonés. El proceso constructivo del conjunto del Seminario culmina en la década de los años cuarenta del pasado siglo con la construcción de un tercer volumen, cuyas fachadas de la plaza de la Universidad y General Alsina igualmente cuentan con protección como Bien Catalogado del Patrimonio.

Inexplicablemente, la Dirección General de Patrimonio, aplicando una política de “fachadismo”, ha dejado sin protección el núcleo fundacional del Seminario, el edificio construido adosado a la iglesia, sobre el que pivotaron las sucesivas ampliaciones. Sin este elemento el conjunto coherente de edificaciones que es en la actualidad el Seminario pasará a conformar una dispersión de inmuebles sin nexo de unión, sin continuidad histórica.

Así las cosas, la Plataforma patrimonialista, en la que se integran junto al Colectivo Ciudadano la asociación de vecinos Osce Biella, la Federación de Barrios Osca XXI y Apudepa, busca el amparo de los grupos políticos con representación municipal para que hagan valer su sensibilidad hacia el patrimonio de la ciudad y palíen esta inaceptable deficiencia enmendando, además, cualquier intención de derribo de los elementos esenciales del conjunto monumental.

De acuerdo con la Ley de Patrimonio Aragonés, corresponde al Ayuntamiento en pleno la protección solicitada, esto es, la declaración como monumento de interés local para la totalidad de los inmuebles que conforman los dos patios históricos y en su caso la inclusión de los mismos en el Catálogo de Edificios de Interés.