Hay quien asegura que las mejores oportunidades nacen de las grandes crisis. De la producida por la pandemia del coronavirus, nacen algunas situaciones que merece la pena aprovechar, como puede ser la adquisición de un vehículo de ocasión. La bajada en ventas activa en los concesionarios sistemas para captar ventas, que mejoran las opciones de financiación, disminuye los precios y favorece la suma de equipamiento en los vehículos por el mismo precio.

Por otra parte, la variedad disponible de modelos y marcas es más amplia. Muchos concesionarios, como Grupo Gedeauto, pone a disposición del cliente interesado en comprar coche segunda mano más de 100 coches de ocasión, disponibles tanto para la provincia de Cáceres como Badajoz. Audi, Citroën, Peugeot, Škoda, Seat, Volkswagen… Normalmente con menos de 100.000 Kilómetros, a un precio sin competencia posible.

Situación de los vehículos de ocasión en la actualidad

El precio medio se estanca, aunque en los primeros meses del año se haya mantenido al alza situándose en los 16.475 euros, aproximadamente un 3 % más que en diciembre del pasado año.

Sin embargo, es el diésel con una antigüedad de entre tres y cinco años el tipo de vehículo que sigue manteniendo sus precios, resistiéndose a la caída generalizada. Según datos ofrecidos por la Asociación Nacional de Comerciantes de vehículos (Ancove), aunque la caída en ventas es grave, nada comparado con la que se viene sucediendo en los últimos meses del 2020. Por ejemplo, en el mes de octubre la caída fue del 6,3%, en noviembre del 6,9 %, y en diciembre del 5,8 %.

Coches de menos de 1 año

Si se hace mención a los vehículos según antigüedad, el mercado de compra venta de ocasión se mantiene bastante fragmentado. Se da una mayor demanda en los vehículos de uno a tres años, aunque en líneas generales el descenso, de hasta el 66,5%, se refiere a aquellos de menos de 12 meses de antigüedad. Esto se debe a un efecto estadístico según Ancove, ya que en el año pasado los coches con menos de medio año recibían las ayudas del plan renove, lo que produjo un efecto muy positivo en las ventas de los Kilometro cero. Así mismo, explicaría la disminución en las ventas de los turismos con menos de 12 meses.

Coches de más de 3 años

Las ventas aguantan con respecto a los vehículos de entre 3 y 5 años, con un leve descenso del 9 % que, comparado con los de más de 5 años es bastante positivo, ya que a partir de esta edad caen en picado colocándose por encima del 24 % de pérdidas.

Según su funcionamiento

En relación al motor, como ya se ha mencionado brevemente, el diésel, aun sufriendo una caída en la cuota de mercado en este sector del 26,6 %, se mantiene en la posición de cabeza con un 60 % de las transacciones totales.

Por otra parte, parece que conquistan terreno los coches eléctricos, subiendo con mucha fuerza al superar en un 48 % sus ventas anteriores, aunque esto siga representando un volumen muy pequeño en ventas, solo 581 unidades. Sin embargo, es muy representativo el interés que muestra el público en general por este sistema de transporte. En el momento en que bajen estos precios, el boom será inevitable.

Conclusión de un periodo negativo

Como cabe suponer enero, al igual que todo el año 2020, puede declararse como catastrófico para el sector del automóvil en general. El gran perdedor se cebó en el mercado de los turismos nuevos que se estancó en el 51 %. El de ocasión no se libró, pero solo bajó un 26,4 %.

Parte de la responsabilidad de que el agujero de los coches de segunda mano no se abriera creando el abismo que sí se abrió en el entorno de los coches nuevos la tuvieron los propios concesionarios. Estos profesionales supieron ver el problema y atajarlo ofreciendo mejores condiciones y atención a sus clientes.

Ejemplos como los del Grupo Gedeauto, referentes en este sector gracias a su enorme variedad de vehículos, estado de los mismos, atención al cliente y precios sin competencia. Son concesionarios como el mencionado los que han logrado a base de esfuerzo y estrategia comercial contener esta debacle y mantener un nivel de ventas aceptable, incluso en los peores días de la crisis sanitaria.