Un anciano de 88 años de Aínsa, residente en la Residencia Comarcal de la Tercera Edad de Sobrarbe, fue ingresado ayer en el Hospital de Barbastro tras detectarle legionela. El paciente fue conducido hasta el centro sanitario de Barbastro por el propio personal de la residencia al considerar que podía sufrir una neumonía.

El paciente llegó por la mañana con fiebre al servicio de Urgencias donde fue examinado y al realizarle los tratamientos pertinentes, entre ellos un cultivo de orina, se le detectó legionela positiva.

Los profesionales sanitarios que le atendieron no lo encontraron en estado grave por lo que lo subieron a planta para ser tratado de una neumonía específica, provocada por la legionela. Según la fuentes médicas consultadas por este medio, el anciano se encuentra estable, no está grave y no peligra su estado. El protocolo asistencial para una legionela que no es grave, como es el caso, supone una cura en planta de un periodo que iría de entre cinco a siete días, según precisaron las mismas fuentes médicas.

En la Residencia Comarcal de la Tercera Edad de Sobrarbe de Aínsa dudan de que el paciente pudiera haber contraído la legionela en su centro ya que hasta el momento no se han detectado más casos de residentes afectados. Como aseguraron el enfermo es un residente valido, que lleva vida normal fuera de la residencia.

El contagio por legionela se produce por estar expuestos al agua pulverizada propia de los aires acondicionados u otros conductos del agua (saunas, baños, balnearios, …). Para su erradicación, una vez que se conoce el foco de la epidemia, habría que clorar los depósitos de agua o reparar el aire acondicionado.