El grupo municipal de Ciudadanos ha pedido al Ayuntamiento de Jaca que ponga su granito de arena para contribuir a mitigar las consecuencias de esta guerra, en las personas más vulnerables, los niños, con la puesta en marcha de una iniciativa solidaria, como Ciudad Amiga de la Infancia. “Jaca es una ciudad solidaria y la ciudadanía está demostrando su capacidad para atender el drama humano que estamos viendo en Ucrania. Es el momento de mostrar la solidaridad del Ayuntamiento de Jaca, y tomar medidas excepcionales para poder afrontar esta realidad desde el compromiso y la protección a los menores desplazados”, ha destacado la portavoz de Cs, Matilde Campo.
Para ello, la formación liberal ha propuesto distintas acciones para garantizar los derechos de los niños y la atención de sus necesidades. Por un lado, propone la adhesión del consistorio “a todas las iniciativas encaminadas al restablecimiento de la paz, a la convivencia democrática, al respeto a la legalidad y a los derechos humanos”. Además solicita el compromiso para la puesta en marcha de un plan de apoyo para reforzar la ayuda humanitaria a las organizaciones que están trabajando activamente en favor de la emergencia de Ucrania, poniendo a disposición los recursos municipales.
Además, Ciudadanos plantea realizar una modificación de crédito para habilitar una donación económica de carácter excepcional, para ayudar a solventar las necesidades de emergencia provocadas por la guerra y, asimismo, la implicación para que pueda modificarse el plan anual de subvenciones e incluir esta iniciativa solidaria con los niños refugiados de Ucrania, “para contribuir a reforzar la ayuda humanitaria de las ONG a los más vulnerables durante el periodo de la postguerra”, ha añadido la portavoz.
Por otro lado, Ciudadanos Aragón ha presentado una iniciativa para que la Comunidad Autónoma pueda aunar criterios y canalizar la ayuda y la instalación de los refugiados ucranianos que van a llegar a nuestro territorio. Los liberales reclaman que se active un servicio de orientación para ellos, disponer de traductores y sensibilizar a la población aragonesa de lo importante que es acoger a familias rotas por culpa de la guerra provocada por Putin.
Esta iniciativa también incluye un plan de sensibilización para transmitir el valor de la convivencia en diversidad y resaltar los beneficios que supondrían la llegada de nuevos habitantes y promover espacios de intercambio cultural.
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