“Los habitantes de los pueblos de montaña han de tener las mismas oportunidades y derechos iguales a los que disponen quienes viven en las ciudades o cabeceras de comarca”, ha dicho Miguel Gracia en la clausura este jueves del II Congreso de la Asociación de Municipios de Montaña que ha tenido lugar en Lérida y que ha reunido a un centenar de representantes de ayuntamientos, entidades y colectivos de todo España que trabajan en la defensa de este tipo de poblaciones.
Miguel Gracia ha argumentado que “en la actualidad los habitantes de la montaña no tienen las mismas oportunidades que los de las urbes y la brecha de la desigualdad sigue aumentando”. Para hacer frente a esta situación, que en la provincia de Huesca es un problema acuciante en los últimos 50 años, cuando se ha perdido el 50% de la población, el responsable de la DPH ha considerado necesario “organizarnos y tener voz propia, constituirnos a modo de lobby de presión para poder llegar a los centros de decisión donde se marcan las normativas e iniciativas necesarias para hacer frente a este tipo de realidades, con la despoblación como principal problema”.
En este sentido, Miguel Gracia ha defendido la necesidad de normativa específica diferenciada para los municipios de montaña de forma que permita a familias, emprendedores y empresarios el poder instalarse a vivir y trabajar en estos pueblos. Además de políticas de discriminación positiva, el Presidente de DPH considera prioritarias acciones en materia de monitores que cubran los servicios de la ley de Dependencia, la puesta en marcha de servicios a mujeres y jóvenes, equipamientos que permitan la conciliación como escuelas infantiles, impulsar mejoras en el transporte o generar iniciativas de multiactividad económica.
También Miguel Gracia ha considerado importante acciones en políticas fiscales que permitan exenciones desde el IVA al IRPF, desgravaciones en las cotizaciones de la seguridad social, bonificaciones en el coste energético, en definitiva un paquete de medidas a aplicar a las familias, empresarios y emprendedores que quieran instalarse a trabajar y vivir en los pueblos de montaña. De igual forma, estas acciones han de ir acompañadas por otras acciones que permiten el asentamiento poblacional, como es el impulso a las comunicaciones tecnológicas para que, independientemente de donde se resida, todo el mundo disponga de igualdad de oportunidades en el acceso a la sociedad digital.
Miguel Gracia ha felicitado la labor de esta Asociación de Pueblos de Montaña así como de otras personas y entidades que dan voz a las necesidades de esta parte del territorio. En la clausura de este Congreso, contextualizado en la celebración del Salón del Deporte y Turismo de Montaña que hasta el domingo se celebra en Lérida, Miguel Gracia se ha referido a la realidad y situación actual de los núcleos habitados de montaña. Ha hecho alusión a la necesidad de dar respuesta y cumplir con el artículo 130.2 de la Constitución española, que insta a los poderes públicos a dispensar un tratamiento especial a las zonas de montaña.
El Presidente de la DPH ha concluido urgiendo a la necesidad de poner fin a la despoblación de las zonas de montaña. “En su día se conquistó el desierto geográfico y demográfico de los Monegros impulsando los regadíos y los pueblos de colonización; hoy son necesarias de manera prioritaria medidas que pongan tengan en cuenta la realidad de los pueblos de montaña: su orografía, la dispersión geográfica de la población en montaña y el envejecimiento poblacional, entre otras cuestiones”, ha dicho.
Francés Boya ha sido reelegido presidente de esMontañas, la asamblea de municipios de montaña durante la sesión del jueves, una jornada en la que han precedido a Miguel Gracias las intervenciones de Carlos Barrabés (presidente del grupo Barrabés), Aurelio García (director de la Escuela de Negocios del Pirineo), Marc Canavaggia, experto en planes de desarrollo turístico y Javier Gonzalo, de Gonzalo Abogados, que lleva la asesoría jurídica de esMontañas.
Leave a Reply