En Aragón, más del 50% de la población adulta supera su peso ideal. Los resultados indican que más del 35% de las personas tienen sobrepeso y más del 15% padece obesidad. Estos datos pueden complicarse por malos hábitos relacionados con una mala alimentación, el abuso de productos de panadería, el consumo excesivo de bebidas alcohólicas y el sedentarismo.

Los datos también son preocupantes en la población infantil. De hecho, uno de cada cinco niños padecen sobrepeso, aunque este porcentaje varía mucho en toda la comunidad autónoma. En algunas poblaciones, el índice alcanza el 66%, mientras que en otras, el índice es casi inferior al 9%.

El confinamiento y la obesidad

Según una investigación realizada por la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, el 44,3% de las personas afirma haber subido entre 1-3 kg durante el confinamiento.

Algunos de los factores por los que subieron de peso incluyen los malos hábitos alimenticios, así como un mayor consumo de bebidas alcohólicas y productos horneados. Todo esto complementado con falta de ejercicio físico o aumento de la jornada laboral frente al televisor o al ordenador.

En un contexto de pandemia, esta situación es realmente preocupante, pues la obesidad representa un factor de riesgo para los diagnosticados de COVID-19. El 80 % de los pacientes que precisaron intubación o ventilación mecánica fallecieron debido a que sus cuerpos no resistieron a las intervenciones.

En ese contexto, los especialistas mencionan la importancia de tomar consciencia sobre la obesidad y seguir algunas recomendaciones para controlar el peso. Las actividades incluyen aprender nuevos hábitos de alimentación y actividad física para tener un estilo de vida más saludable. Especialmente para mejorar los niveles de energía, movilidad física y el estado de ánimo en general.

El agua también cumple un rol muy importante en el control del peso, básicamente porque reduce los antojos. Algunas bebidas naturales como el té verde, la garcinia cambogia y la cola de caballo también pueden considerarse como fuentes de hidratación muy convenientes.

El té verde es popularmente conocido por sus propiedades diuréticas, pero también tiene una alta concentración de antioxidantes que pueden ayudar a reducir la grasa. Asimismo, recientemente se ha descubierto que la pulpa de la fruta de garcinia cambogia tiene propiedades saciantes e impide la formación de grasa a partir de los hidratos de carbono no utilizados después de una comida abundante. Finalmente, la cola de caballo es empleada para combatir la flacidez y los daños ocasionados por la pérdida de peso.