Cimentación

Todo constructor con quien hables insistirá en contar con una base de cimentación nivelada sobre la que trabajar. 

A diferencia de en la vivienda de madera, que cuenta con elementos más pesados (teja de cerámica, grandes secciones de tabiques y techo en madera, mobiliario…), la caseta supondrá en sí misma un peso mucho más ligero. Cualquier imperfección de la base sobre la que se instale tendrá un efecto mucho más visible y difícil de resolver después en tu caseta de madera terminada.

Pintura y tratamiento

El tratamiento de la cabaña de madera es un punto de confusión, ya que no existe información clara ahí fuera.

La solución que comúnmente se aplica a la madera se conoce como lasur a poro abierto, que en lugar de generar una capa superficial sobre la madera, penetra en ella nutriéndola y protegiéndola de las termitas, hongos de pudrición, xilófagos… Además, cuenta con pigmentos que la protegerán de la agresiva radiación solar mediterránea.

En las viviendas de madera el asunto es más complejo, ya que debemos distinguir entre especies del árbol más adecuadas para un uso estructural, de recubrimiento, de carpintería… y, a su vez, hemos de diferenciar si cuentan con mayor o menor impregnabilidad o capacidad de absorción de los tratamientos.

Sin embargo, las cabañas de madera, por ser más ligeras y por su uso más habitual como local de trabajo o como segundo hogar de vacaciones y fines de semana; permiten simplificar esta elección de especie de árbol y tratamientos.

Muchas empresas vendedoras de casetas de madera te recomendarán aplicar un lasur oscuro.

Salvo que realmente te guste (por ejemplo el tono nogal), personalmente elegiría uno más claro al principio, como son roble o pino. La razón es que tanto la madera como el lasur tenderán a oscurecerse con el tiempo, el sol y la aplicación de sucesivas capas.

En todo caso, lo más recomendable sería elegir un lasur con pigmentos, que reflejarán las agresivas radiaciones solares, dejando así a la madera mejor protegida.

La cubierta

En las viviendas de madera la teja de cerámica supone un óptimo balance entre estética y resistencia estructural.

En las cabañas y casetas de madera nos interesa evitar un tejado que les suponga excesivo peso que sostener.

En este sentido, el mercado ofrece muchas opciones.

Dependerá mucho del uso final que vayas a hacer de la cabaña (dormir en ella o no, solo trabajo, almacenaje…), de tu sensibilidad al ruido (por ejemplo, la lluvia) y de tu gusto por el uso de materiales más naturales.

Finalmente, nos gustaría recordarte que sí existe una solución para poder aprovechar la teja de cerámica -nuestra solución favorita- también en tu cabaña de madera.

La teja de cerámica consigue, desde nuestro punto de vista, el mejor balance entre estética, comportamiento estructural y ecología. De aspecto muy hogareño, su origen es natural: el barro. Y sobre todo, gracias a su peso, favorecemos un más adecuado asentamiento de la propia estructura de madera. En definitiva, una mejor estabilidad tras la obra.

Para poder aprovechar las ventajas de la teja mixta, el tejado de la cabaña necesitará contar con la suficiente pendiente (al menos techo a dos aguas de 15º), que permita verter el agua de lluvia rápidamente. Además, las paredes de la cabaña deberán ser capaces de sostener el peso de dicha teja y la posible sobrecarga de nieve. En nuestra experiencia, un mínimo de 7 cm de madera maciza de tabique (sin contar la posible cámara de aislamiento) será recomendable.

Un nuevo comienzo

Estamos muy muy ilusionados con el relanzamiento de nuestro proyecto de construcción en madera este año. Tras más de una década fabricando y construyendo con madera por toda Europa, y tras media década en España, estamos dando un paso realmente importante abriendo nuestra sede en España. Nos encantará contar contigo durante esta aventura.