A pesar de las previsiones meteorológicas, la lluvia respetó a los cientos de oscenses que se se apostaron a lo largo del recorrido de la solemne Procesión del Santo Entierro, que tuvo lugar ayer viernes, en la capital. Veinte pasos escultóricos, con la participación de todas las cofradías y grupos procesionales, dramatizan la historia de la Salvación, según la cual, Jesús de Nazaret entregó su vida en la Cruz para redimir a la humanidad. No ha faltado la participación, entre otros, de representantes de las Fuerzas Armadas, el clero o la banda de música de Huesca.

La procesión partía a las 19:00 horas de la Plaza de Santo Domingo para continuar por el Coso Bajo, Ramiro el Monje, plaza de San Pedro, San Salvador, plaza de Arista, Las Cortes, plaza de la Catedral, Santiago, Coso Alto, Moya, plaza de López Allué, Cuatro Reyes, Goya, Coso Bajo y plaza de Santo Domingo.

Los pasos escultóricos de los que consta son los siguientes:

El Cenáculo (Cofradía Salesiana del Santo Cáliz)
La Oración del Huerto (Archicofradía de la Santísima Vera Cruz)
El Prendimiento (Cofradía del Prendimiento)
Cristo de la Columna (Cofradía de Nuestro Señor Atado a la Columna)
La Flagelación (Cofradía de la Vera Cruz)
La Corona de Espinas (Cofradía de la Preciosísima Sangre)
Ecce Homo (Cofradía del Ecce Homo)
Santo Cristo de los Gitanos (Cofradía del Santo Cristo de los Gitanos)
Nuestro Padre Jesús Nazareno (Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno)
La Caída de Jesús en la Calle de La Amargura (Cofradía de la Vera Cruz)
La Verónica (Cofradía de la Vera Cruz)
La Enclavación (Cofradía de Santiago)
El Calvario (Cofradía del Santo Cristo de los Milagros y San Lorenzo Mártir)
Santo Cristo de la Esperanza (Cofradía del Santo Cristo de la Esperanza)
El Cristo del Perdón (Cofradía del Cristo del Perdón)
La Dolorosa (Cofradía de la Vera Cruz)
El Descendimiento (Cofradía de El Descendimiento y las lágrimas de Nuestra Señora)
La Piedad (Cofradía de la Vera Cruz y Asociación de Amas de Casa)
Cristo Yacente (Archicofradía de la Santísima Vera Cruz)

Creyentes y no creyentes, por devoción, por tradición, por amor al arte o, sencillamente, para pasar un buen rato, los ciudadanos de Huesca han disfrutado de este evento, declarado de Interés Turístico en Aragón, y que a nadie ha dejado indiferente.

Galería de imágenes por Alejandro Lansac