El TOC es uno de esos trastornos de los que se ha oído hablar alguna vez, pero que no se conoce en profundidad. La persona afectada con TOC tiene una serie de ideas, pensamientos, sentimientos y sensaciones obsesivas (obsesiones), y unos comportamientos repetitivos que se obligan a hacer de forma recurrente (compulsiones). La mayoría de las personas que padecen este trastorno son conscientes de su obsesión, pero no pueden evitar sentir sus obsesiones ni llevar a cabo sus compulsiones.

Viviendo con TOC

Al ser un trastorno que provoca pensamientos intrusivos (obsesiones) provoca gran intranquilidad y nerviosismo en la persona que lo sufre. Con el fin de minimizar esta inquietud se generan conductas repetitivas (compulsiones) que provocan un gran malestar e interfieren en la vida cotidiana del sujeto que padece el problema. Tal es el nivel de alcance negativo y la repercusión que tiene en su día a día que puede llegar a incapacitarle, afectando a su vida laboral y a su ámbito social y personal.

Las obsesiones son pensamientos involuntarios que se repiten frecuentemente y que causan una gran ansiedad en quien los sufre. Por ejemplo, se incluyen dentro de las obsesiones ideas de accidente o muerte de familiar y pensamientos de contaminación o enfermedad.

En cambio, las compulsiones son comportamientos voluntarios o actos mentales que tienen como finalidad eliminar la ansiedad que generan las obsesiones. En el fondo, estas compulsiones son rituales de tipo supersticioso que lleva a cabo el sujeto, pues piensa que, de este modo, no ocurrirán realmente los pensamientos intrusivos que ha tenido. Son ejemplos de compulsiones el lavado frecuente de manos u objetos, tocar tres veces el timbre de una puerta, rezar mentalmente, comprobar que se ha cerrado la llave del gas varias veces…

El sujeto que sufre este tipo de trastorno se ve atrapado por los rituales que lleva a cabo, a pesar de que en el fondo reconoce que son irracionales y se avergüenza de realizarlos, creando un enorme estrés e interfiriendo en su vida diaria. Por este motivo, en muchas ocasiones puede existir aislamiento social.

La psicología TOC

Afortunadamente, la psicología toc para tratar este tipo de trastorno está cada día más avanzada y ofrece excelentes resultados. De este modo, los pacientes que son atendidos adecuadamente y reciben el tipo de terapia que necesitan avanzan muy positivamente en la superación de su enfermedad.

Psicólogo Alejandro Ibarra

Este reconocido especialista en TOC cuenta con más de 15 años de experiencia en terapia cognitivo conductual y EPR. El principal objetivo de sus sesiones es devolverle al paciente el control y calidad de vida que nunca debió perder, así como su autonomía, funcionalidad el estado de bienestar perdido. Sus trabajos se llevan a cabo adaptándose a los nuevos tiempos y haciendo uso de las tecnologías más actuales e innovadoras, el equipo del psicólogo Alejandro Ibarra facilita el acceso de los pacientes a las sesiones a través de las terapias online. De esta forma, no existe límites geográficos ni problemas de desplazamientos que impidan recibir el tratamiento psicológico que se necesita.

Especialista en Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)

La trayectoria de este reconocido psicólogo hasta convertirse en especialista en TOC ha sido puramente vocacional, nace de una necesidad de formarse ampliamente en este trastorno para poder ayudar a los pacientes que llegaban a su consulta.

Fue en el año 2005 cuando se enfrentó por primera vez a una persona afectada de TOC como paciente. En ese momento, tomó conciencia de lo duro que es, tanto para los pacientes como para sus familiares, y ahí encontró su nueva vocación: ayudar a reducir el sufrimiento de este colectivo.

A pesar de sus ganas y empeño, se dio cuenta de que sus estudios de psicología no eran suficiente, y retomó de nuevo los estudios con la realización de un Máster Oficial de Psicología de la Salud (Universidad de Sevilla). No obstante, las limitaciones y falta de información seguían estando ahí, mientras que su compromiso no hacía más que aumentar.

Por este motivo, no dudó en viajar hasta Estados Unidos y participar tres años seguidos en el Congreso Americano de Trastorno Obsesivo Compulsivo que realiza la IOCDF (Fundación Internacional de TOC), en el último año, como ponente.

Durante un tiempo llevó a cabo estudios de especialización en TOC con Jonathan Abramowitz (uno de los máximos referentes en TOC a nivel mundial). De este modo, se especializó en la técnica de Exposición con Prevención de Respuesta, Terapia Cognitivo Conductual para el TOC y trastornos relacionados en el “OCD Houston Program”.

Así mismo, aprovecho sus viajes en Estados Unidos para entrar en contacto con centros especializados en tratamiento de TOC de referencia localizados en Miami, Boston, Chicago, Houston, Nueva York, siempre con el propósito de aprender más de este trastorno tan complejo.

Todo este bagaje curricular y profesional es el que le ha capacitado para poder ayudar de una forma más eficiente a sus pacientes en la actualidad. No es extraño, por tanto, que esté considerado como una de las figuras clave en este país para tratar los trastornos TOC.