EL SIGNIFICADO DE DENOMINACIÓN DE ORIGEN

La Denominación de Origen es, junto a las Indicaciones Geográficas Protegidas, un sistema jurídico de productos agrarios, alimenticios y de bebidas espirituosas que reúnen determinadas calidades y características derivadas del lugar donde se originan, producen o son elaborados.

Básicamente, se trata de un mecanismo que utilizamos en nuestro país para valorar un cierto tipo de características de la zona donde ha sido elaborado un producto en concreto, de esta manera, reconocemos su calidad con este sello distintivo.

Todas las Denominaciones de Origen son reguladas mediante una serie de reglamentos, decretos y leyes orgánicas. Los consejos reguladores de cada denominación son los encargados de velar por el cumplimiento de dichas normas.

LA IMPORTANCIA DE LA DENOMINACIÓN DE ORIGEN EN EL VINO Y ALGUNOS REQUISITOS

Ahora ya sabemos qué significa exactamente la etiqueta Denominación de Origen, pero, ¿cuál es su importancia en el vino?

Para empezar, una D.O. establece que, para la elaboración de ese producto, se han tenido que dar unas condiciones de producción y elaboración, en la que la conjugación de factores naturales, como el suelo o el clima, y los factores humanos, han logrado una calidad suprema y que no se puede encontrar en otros productos similares fuera de esa zona.

Así, surgen los siguientes requisitos que deben cumplir, sí o sí, los vinos con D.O.:

• Las uvas con las que se ha elaborado el vino proceden de la propia región, comarca, localidad o lugar determinado.
• Tienen un gran reconocimiento popular, que es abalado por un enorme prestigio comercial.
• Ofrecen una experiencia de alta calidad, y cuenta con unas características propias.

LA DENOMINACIÓN DE ORIGEN DEL SOMONTANO

En el Alto Aragón tenemos la fortuna de contar con la DO Somontano, una de las más importantes de todo el país en la zona del Somontano, donde la extensión de viñas dedicadas supera las cuatro mil hectáreas.

Un producto excepcional que cuenta con una amplia variedad de tipos, cada uno con un sabor y una experiencia irrepetible, gracias a la unión de artesanía y naturaleza. Algunos ejemplos pueden ser el Secastilla Vino para aportar elegancia, o el atrevido e intenso Vino Cojón de Gato.