Cada vez son más los usuarios a nivel particular que cuentan con una en casa para hacer trabajos de bricolaje. Un aparato ideal para llevar a cabo todo tipo de manualidades que requieren cortar, retirar, desbastar o lijar diferentes materiales como el ladrillo, el hormigón, el metal o el plástico

Las personas a las que les gusta hacer las cosas por ellos mismos, siguiendo la corriente DIY (Do it Yourself), cuenta en su casa con un pequeño taller con los elementos imprescindibles para realizar sus manualidades o sus tareas de bricolaje. Entre las herramientas eléctricas, una que gana en popularidad son las amoladoras, por la gran versatilidad que ofrecen en este tipo de actividades.

En AmoladorasWorld.com se puede encontrar una amplia selección de las amoladoras más destacadas en el mercado actual. Esta guía de compra en la que se referencian 10 modelos top será de gran ayuda para aquellos particulares que estén pensando en adquirir una que optimice sus trabajos de bricolaje caseros.

¿Qué es una amoladora?

Una amoladora, también conocida como radial, rotaflex o esmeril es una herramienta eléctrica de mano que cuenta con una gran potencia para realizar cortes y desgastes, ofreciendo excelentes resultados en numerosas tareas. Cuentan con un disco resistente para cortar todo tipo de materiales con poco esfuerzo. No obstante, las radiales hacen mucho más que eso gracias a los diferentes accesorios con los que cuenta. Desde cortar materiales duros hasta pulir superficies o desbastar, una amoladora angular es una herramienta esencial para uso profesional que cada vez toma más fuerza entre los aficionados del bricolaje.

Principales usos de la amoladora

Aquellos que todavía no conocen bien el funcionamiento de esta máquina y no están muy familiarizados con su uso, pueden quedar bastante sorprendidos por su versatilidad y la cantidad de opciones que ofrece.

Corte

El principal uso de una amoladora es rectificar y cortar. No solo está preparada para moler metal con el disco adecuado, sino que también puede trabajar otros materiales como la cerámica, la piedra o el hormigón.

En este sentido, puede ser igualmente útil en trabajos de construcción como a la hora de trabajar esculturas de piedra. Son muy utilizadas a la hora de hacer rozas, sacando líneas rectas en los muros de ladrillo para instalar el cableado eléctrico.

Corte de Azulejos

Aunque existe un objeto especializado como cortador de azulejos, una amoladora puede llevar a cabo el corte de azulejos de cerámica con precisión, utilizado para realizar los ajustes necesarios a la hora de colocarlos en las esquinas, por ejemplo. Una de las ventajas que ofrece frente al cortador de azulejos habitual es que sus discos son pequeños y permiten realizar cortes difíciles con gran exactitud.

Limpieza de metal y afilar herramientas

Una de las cualidades más señaladas de una amoladora es su versatilidad, gracias a los diferentes discos y accesorios que se pueden utilizar. En este caso, con un cepillo de alambre o con ruedas permite raspar la pintura y limpiar el metal, dejandomuy pocas marcas a su paso.

Estas ruedas de limpieza se presentan en diferentes tamaños y formas. Con las más pequeñas se pueden quitar las rebabas de los agujeros en metal mientras que las más grandes permiten quitar con facilidad la pintura de superficies muy amplias.

Una amoladora se utiliza recurrentemente para afilar cualquier herramienta de metal para esta recupere su estado óptimo de trabajo.

Consejos de seguridad

La seguridad debe ser lo primero cuando se va a llevar a cabo cualquier trabajo de bricolaje. Especialmente, a la hora de trabajar con una amoladora, en estos casos siempre hay que tomar una serie de precauciones para no sufrir ningún accidente.

En primer lugar, se deben emplear guantes y gafas de protección, en cualquier caso, pero especialmente en aquellos que no están acostumbrados a trabajar con este tipo de herramientas. Cualquier viruta de metal u otro material puede salir despedido y representar un daño muy serio si llegase a entrar en lo ojos.

En segundo lugar, siempre se ha de tener en consideración la dirección de las chispas que se producen en los trabajos y controlarlas. Por un lado, porque perjudican los materiales que tocan, pero sobre todo porque pueden llegar a provocar un incendio.

En tercer lugar, como con cualquier otra herramienta eléctrica, pero sobre todo con aquellas destinadas al corte u otros trabajos peligrosos, se debe desconectar siempre que no se esté utilizando, evitando accidentes por algún descuido.

En último lugar, se ha de conocer con exactitud el material que se va a trabajar y las necesidades del mismo para elegir el disco adecuado. Por otro lado, es importante trabajar con el número de revoluciones apropiado. Por ejemplo, para cortar plástico el número de revoluciones debe ser muy bajo para evitar que se funda y se pegue al disco.

Para concluir, las amoladoras son unas herramientas muy versátiles para los aficionados al bricolaje y las manualidades. No obstante, exige tomar las precauciones pertinentes y mucho sentido común a la hora de utilizarlas para no sufrir ningún tipo de accidente.