La Ruta del Belén de Aragón ultima los preparativos para abrir los 17 nacimientos de 15 municipios altoaragoneses que este año la integran. La Diputación Provincial de Huesca colabora un año más con esta iniciativa que este martes se ha presentado y donde la responsable de Cultura, Berta Fernández, aseguraba que es un reflejo de las tradiciones de nuestra provincia pero también “un buen escaparate para nuestras poblaciones”.

Fernández destacaba, asimismo, la importancia que tiene para la Diputación apoyar iniciativas como estas que surgen de la propia ciudadanía con el objetivo de mostrar nuestras costumbres y tradiciones: “Por eso desde la Diputación intentamos apoyar tanto a ayuntamientos como a las asociaciones y a estos colectivos que trabajan para dinamizar la vida social y cultural y que también sirven de incentivo para fijar población en el territorio”, añadía la diputada.

También ha participado en la presentación el secretario de la Ruta del Belén de Aragón, Arturo López, que comentaba que el año pasado la ruta recibió cerca de 170.000 visitantes de diferentes procedencias de todo Aragón, pero también de comunidades vecinas o del sur de Francia.

Desde hace cuatro años la ruta está impulsada por la Federación Ruta del Belén de Aragón, que se creó con el principal objetivo, tal como explicaba Arturo López, de trabajar para conseguir la mayor divulgación posible sobre el belenismo, y, por tanto, el fomento de los pueblos y las comarcas donde se encuentran estos belenes.

Este año son 17 los belenes que se incluyen en la ruta y todos ellos podrán visitarse del 5 de diciembre al 6 de enero, aunque algunos abren sus puertas al público durante más tiempo. La ruta cuenta con una web (www.rutadelbelen.es) donde se pueden consultar los horarios de apertura y todas las poblaciones, así como más información sobre cada uno de los belenes que participan.

En concreto, si comenzamos de norte a sur de la provincia, la ruta podría empezar en el Sobrarbe por Boltaña, con un belén de más de 80 metros cuadrados, unas 300 figuras y unos asombrosos efectos especiales. De allí a la comarca vecina de la Ribaborza, donde en Graus se encuentra otro belén que nació en 2002. Continuando hacia el sur por la Ribagorza la siguiente parada es Torreciudad, donde encontraremos un nacimiento inspirado en un establo de una casa tradicional del Pirineo formado por imágenes talladas en alabastro y policromadas, que realizó el escultor Joan Mainé.

Ya en el Somontano se puede visitar el belén viviente de Estadilla, se trata del más grande de Aragón y realiza cuatro representaciones (26 y 27 de diciembre y 2 y 3 de enero) en las que participan unas 120 personas. En Barbastro, un belén tradicional que puede visitarse desde hace once años, y en Lagunarrota un montaje de más de 90 metros cuadrados que incluye 400 figuras pintadas a mano.

La Litera cuenta este año con una colección de belenes del mundo en el albergue de los Escolapios de Peralta de la Sal, también con el belén de Esplús, que se construye de forma artesanal en el Pabellón Municipal. Y en Tamarite de Litera son tres los nacimientos que pueden visitarse. Se trata del belén de la Asociación de Amas de Casa, expuesto en el Cine Paseo, el belén de J. Ordóñez, de estilo popular y realizado de manera artesanal, y como novedad se une a la ruta el belén de alfombra, una representación del nacimiento realizada con virutas tintadas que recuerdan a sus famosas alfombras del Corpus y que puede visitarse en el bar Joanet.

En el Cinca Medio no puede faltar el longevo belén de Monzón, una de las referencias belenísticas más importantes a nivel nacional que cuenta con 900 metros cuadrados, 7.000 figuras y que suma cada año unos 50.000 visitantes. Además de éste, en esta comarca se encuentra el belén de Binaced, realizado por Alfredo Citoler, cuenta con muchas figuras móviles que llaman la atención del público y lo convierten en un belén diferente y atractivo. También en Pomar de Cinca tienen su belén, de estilo montañés pues muchas de sus piezas están hechas a partir de materiales como piedra, pizarra, caña o madera. Y en Alcolea puede visitarse un curioso belén compuesto por figuras que proceden de los talleres de imaginería religiosa de Olot.

Para terminar la ruta continuamos por las comarcas del sur de la provincia. Se trata de Monegros, con Sena, y el Bajo Cinca, con Fraga. El de esta última se comenzó ya en 1981 recuperando materiales del convento de Santa Ana para volver a formar el belén monumental que las hermanas realizaban en el colegio, que se ha ido ampliando año a año siguiendo el estilo local.

Como recordaba Arturo López, para que un belén se incluya en la ruta debe contar con una superficie de un mínimo de 25 metros cuadrados y debe tener al menos dos años de antigüedad. Además, miembros de la Federación se encargan de visitar todos los que van a formar parte de la ruta para establecer unos mínimos de calidad que ofrecer al visitante.