Un tablero de visión, también conocido como tablero de sueños o mapa de deseos, es una herramienta poderosa de visualización y manifestación. Consiste en una representación física de tus metas, sueños y aspiraciones para el futuro. A medida que nos acercamos a fin de año, la creación de un tablero de visión puede ser un ritual significativo para establecer intenciones claras y enfocadas para el año venidero.

¿Qué es un tablero de visión y cómo funciona?

Un tablero de visión es, en esencia, un collage que combina imágenes, palabras, frases o incluso objetos que simbolizan lo que deseas atraer o lograr en tu vida. La idea detrás de este tablero es que al ver diariamente estas representaciones, se refuerza la conexión entre tus metas y tu subconsciente.

Psicología de la visualización

Desde un punto de vista psicológico, la visualización es una técnica poderosa. Al visualizar nuestros deseos, activamos las mismas redes neuronales que se activarían si estuviéramos experimentando esos deseos en la realidad. Esto puede aumentar la motivación, mejorar el rendimiento y ayudar a materializar nuestras metas.

Crea tu tablero de visión

Materiales 

• Un tablero de cartulina grande.
• Revistas, para recortar imágenes y palabras.
• Pegamento, tijeras y marcadores.
• Cualquier otro elemento que te inspire, como fotografías, citas, dibujos o telas.
• Rotuladores de colores

Pasos para crear tu tablero de visión

1. Reflexión y definición de metas : Antes de empezar, dedica tiempo a reflexionar sobre lo que realmente quieres en diferentes áreas de tu vida: personal, profesional, salud, relaciones, crecimiento espiritual, etc. Sé específico en tus objetivos y deseos.
2. Selección de materiales : Busca en revistas, libros, o incluso en internet, imágenes y palabras que representen tus metas y sueños. No te limites solo a lo material. También busca imágenes que representen emociones, experiencias o el ambiente que deseas cultivar.
3. Organización y composición : Empieza a organizar tus imágenes y palabras en el tablero. Puedes agruparlas por temas o áreas de vida, o simplemente seguir tu intuición y colocarlas de manera que te parezcan estéticamente agradable y significativa.

Para finalizar, ¡ten presente tu tablero de visión y medita en él todos los días!