El Centro para el Desarrollo de Sobrarbe y Ribagorza ha contado hasta el momento con la participación de más de 300 personas (la suma total es superior, dado que algunas personas han asistido a más de una sesión) en el proceso para diseñar la Estrategia de Desarrollo Local Participativo 2014-2020, que fijará los objetivos, líneas de acción y prioridades de inversión de los fondos europeos gestionados en el territorio durante los próximos años. Esta Estrategia se aplicará a los 53 municipios de Sobrarbe y La Ribagorza, que suman 4.662 kilómetros cuadrados y más de 20.000 habitantes. Así se desprende del balance realizado por CEDESOR de todas las reuniones y acciones realizadas desde que en diciembre de 2014 se iniciara este proceso.

En estas semanas ha tenido lugar la última mesa de trabajo con representantes del sector público y está previsto que el análisis de la situación, propuestas y aportaciones realizadas por los diferentes sectores se incluyan en el documento final que será presentado antes del 2 de septiembre, ajustado a las exigencias técnicas fijadas por la Comisión Europea y el Gobierno de Aragón.

En el último periodo Leader, el que se ha desarrollado desde 2007, ha habido una inversión pública en torno a 6,5 millones de euros pero que ha supuesto más de 16 millones de euros, lo que quiere decir que por cada euro invertido se generan cerca de tres en el territorio. Con estas cifras se han financiado 244 proyectos, principalmente para ayudar a la creación y el desarrollo de microempresas, al fomento de actividades turísticas y a la conservación y mejora del patrimonio rural, pero también para servicios básicos de la economía y la población rural, el aumento del valor añadido de los productos agrícolas y forestales y también de cara a la diversificación hacia actividades en sectores distintos al primario, entre otros.

Mientras, en estos ocho meses de proceso en la elaboración de la nueva Estrategia de desarrollo de CEDESOR, el balance es satisfactorio. Las primeras reuniones contaron con participación de agentes clave de ambas comarcas con el fin de fijar la especialización inteligente del territorio, que apuesta por el posicionamiento de ambas comarcas como referente en la provisión de salud y bienestar.

Entre marzo y mayo se realizaron cuatro mesas de trabajo sectoriales en las que se consensuó el análisis de situación y se plantearon propuestas concretas para los distintos ámbitos socioeconómicos: una centrada en la agricultura, ganadería y forestal, otra sobre turismo en la que se incluyeron también propuestas culturales y deportivas con potencial turístico; una tercera mesa de trabajo de construcción y afines, y la cuarta sobre el sector social, formación y empleo. A estas hay que sumar dos sesiones con productores agroalimentarios, cuyas reflexiones y conclusiones sobre el sector han sido también tenidas en cuenta para la elaboración de la Estrategia de Desarrollo Local Participativo. Para facilitar la transparencia y trazabilidad de las aportaciones realizadas, las actas de las sesiones fueron remitidas a todas las personas y entidades convocadas, y compartidas en la plataforma de participación online habilitada para el proceso.

Con este mismo objetivo, aunque con una metodología diferente, se desarrollaron entre abril y junio diez talleres participativos en los Institutos de Enseñanza Secundaria de Aínsa y Graus, con estudiantes de 13 a 18 años, así como una mesa específica sobre innovación, organizada conjuntamente con el Grupo de Desarrollo Rural ADECUARA.

Las últimas reuniones celebradas en este mes de agosto fueron de carácter técnico (turismo y PYMES), en las que participaron agentes de empleo y desarrollo local y otros representantes de entidades públicas y privadas del territorio, así como una mesa general técnica con representantes de ambas Comarcas, DPH y DGA.