Los vecinos de Estiche y del municipio de San Miguel de Cinca ya pueden disfrutar de la práctica de la escalada de forma segura en el nuevo rocódromo inaugurado ayer por la mañana en la localidad mediocinqueña y al que se le ha dado el nombre de Raúl Martínez, escalador zaragozano pero montisonense de adopción.
El rocódromo Raúl Martínez se encuentra dentro del parque de ‘La Fuente’ que también ha sido remodelado para albergar esta infraestructura deportiva.
El propio Raúl Martínez ha asistido al descubrimiento de la placa que luce su nombre junto. Le han acompañado la alcaldesa del municipio de San Miguel de Cinca, Elisa Sancho, la alcaldesa pedánea Beatriz Barber y miembros del club de montaña Estilic Cinca Medio de Estiche y de la Ribagorza, impulsores del rocódromo.
La inversión de esta infraestructura deportiva ha sido de 9.000 euros, financiados por el Ayuntamiento y la Comarca del Cinca Medio, así como por aportaciones vecinales. La construcción del rocódromo ya comenzó en 2015 y por fin se ha terminado de acondicionar el entorno, y ya está listo para que los jóvenes se inicien en la escalada.
Se trata de un rocódromo pensado sobre todo para el público infantil y juvenil, para que se acerquen a esta disciplina deportiva que goza de gran predicamento en la localidad. Cabe apuntar que Estiche cuenta con unos 200 habitantes y el club Estilic lo forman más de una veintena de socios.
Desde los clubes montañeros Estilic y de la Ribagorza han programado una serie de actividades que se van a desarrollar durante el verano y a lo largo del próximo escolar con los niños de la comarca para que disfruten de una forma segura de la escalada y crear cantera de nuevos montañeros como Raúl Martínez.
La alcaldesa de San Miguel de Cinca, Elisa Sancho, ha recalcado que esta infraestructura “estará abierta a actividades escolares y particulares de la comarca y todo aquel que quiera venir”. Y además ha señalado que este tipo de instalaciones “no son habituales en nuestros pueblos y permiten sensibilizar a los niños en un deporte como la escalada, y ojalá en un futuro tengamos montañeros como Raúl Martínez o Carlos Pauner”. Sancho también ha subrayado la colaboración vecinal y del club Estilic en impulsar el rocódromo.
El presidente de la Comarca del Cinca Medio, Miguel Aso, ha recordado como este proyecto, heredado del anterior mandato, ha tenido que ser modificado para que el ente comarcal pueda adelantar los 6.000 euros aportados para poder iniciar los trabajos, en lugar de que lo hiciera el club Estilic con sus escasos fondos, como estaba recogido en el anterior convenio. “Este tipo de infraestructuras son muy importantes en todas las localidades y el gran reto es su dinamización. En lo que podamos apoyar desde la consejería de Deportes lo haremos junto con el Ayuntamiento y el club Estilic para que no sea un monumento”, ha apuntado el presidente del Cinca Medio.
El nombre de Raúl Martínez para el rocódromo no ha albergado dudas entre los miembros de los clubes montañeros que lo propusieron. Su pasión por la montaña comenzó en el Pirineo y en 2000 continuó a nivel internacional con incursiones y logros en Alpes, Atlas, Andes, para pasar a la cordillera del Himalaya, Yosemite o Fuji. Desde hace doce años trabaja en el marco de la Federación Aragonesa de Montañismo en la formación de los montañeros en los clubes para aumentar la seguridad en todo tipo de modalidades de este deporte.
El montañero Raúl Martínez se ha mostrado “orgulloso y agradecido” por el reconocimiento brindado desde los clubes de montaña Estilic y Ribagorza “por un trayectoria hecha y por hacer”, como ha matizado Javier Torres, presidente del último club. “Este tipo de homenajes hay que hacerlos en vida y eso es lo que quiero para este rocódromo, que tenga vida y no sea una escultura a la escalada como hay muchas por ahí. Lo importante es que los jóvenes lo usen y lo disfruten”, ha afirmado Martínez.
El escalador de Monzón toma mañana un avión en Zaragoza que le llevará a Turquía y de ahí a Tanzania para emprender junto a su compañero Carlos Pauner el reto ‘Las siete cimas’ que persigue coronar las montañas más altas de cada continente. El Kilimanjaro es, con 5.895 metros, el pico más alto de África. Su ascenso no presenta tantas complicaciones como los ochomiles a los que están acostumbrados Martínez y Pauner. Precisamente Carlos Pauner, que repite expedición con Martínez como ya hiciera en el Aconcagua, no ha querido perderse este “merecido homenaje a Raúl, un montañero cargado de valores como la entrega total”.
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