Ya se empieza a hablar de los nominados a los Oscar y, como no, la literatura está presente. Entre la nominada a mejor película se encuentra «La habitación» de Lenny Abrahamson, un filme basado en la novela Room de Emma Donoghue.

Arranca la novela entre cuatro paredes en las que viven Jack y su madre… Encerrados… Secuestrados.

Para Jack, un niño de 5 años, La habitación, un habitáculo cerrado con una única entrada de luz, la Claraboya, no sólo es su mundo, sino el único mundo que existe.

En el mundo de Jack, HABITACIÓN, hay también otras cosas, Mecedora, Tele, Alfombra, Armario, Mesa… Todas ellas sutilmente escritas por la autora con mayúsculas, resaltándonos la importancia de cada elemento de la estancia.

Room, nos cuenta la escalofriante historia, escalofriante sin necesidad de hacerte sentir miedo, o tal vez sí, del secuestro de Mamá y Jack, fruto de las continuas violaciones sufridas por su madre a manos de su secuestrador.

Mamá, que lleva siete años confinada en esa habitación se las ingenia para hacer un mundo feliz para Jack pese a las terribles circunstancias: hacen la comida, leen, inventan diferentes juegos, hacen crecer la Fortaleza a base de rollos de papel higiénico, incluso hacen la gimnasia diaria sin poder salir al exterior. Un asombroso derroche de imaginación de Mamá para hacer feliz a un niño que cree que el mundo exterior solo existe en la tele.

¿Cómo se vive entre cuatro paredes? ¿Cómo ve la vida un niño que apenas tiene a su disposición un par de libros y un coche de juguete? ¿De dónde sacas fuerzas para esconder la realidad a un hijo sólo por verlo crecer feliz? ¿En qué momento debes enfrentarlo a aceptar esa realidad?

Contada en primera persona por Jack, con toda la ingenuidad y la inocencia de un niño, la historia de «La habitación», conmueve y enternece hasta el límite que, pese a crudo de los hechos que relata, este niño consigue arrancarte alguna sonrisa.

El libro no es una obra maestra, pero es de lectura fácil y nos muestra el lado más inocente de la infancia, la maldad del ser humano, el instinto de supervivencia y el amor infinito de una madre hacia su hijo.

La recomiendo segura que a muchos les gustará… Y es que yo, que no soy muy fan del Oscars, estoy deseando ir a ver la película a ver si consigue hacerme sentir tanto como la novela.